Los tiempos que corren. I.

Los líderes de las máximas potencias mundiales, el G-20, más los lideres de algunas potencias emergentes y algún que otro presidente de comparsa, cómo el de mi país, están reunidos otra vez, ahora en Londres, y pretenden en estas magnas y costosas reuniones dar con las soluciones para la calamitosa situación de “ crisis” en la que nos encontramos.
¡Pero lo que realmente pretenden salvar o reanimar es el corrupto, e insostenible sistema financiero internacional! Para que así al cabo de unos treinta, cuarenta o cincuenta años, nosotros mismos, nuestros hijos y nuestros nietos después de ser explotados nuevamente o por primera vez, estemos y nos encontremos en la misma desagradable situación. Y los futuros lideres de las futuras potencias mundiales, reuniéndose para volver a salvar y premiar a los hijos o a los hijos de los hijos de ….
Así que estos pomposos líderes mundiales se reúnen para salvar y premiar a sus superiores. A los grandes empresarios, apóstoles del neoliberalismo de la globalización y del despido libre. Y a los grandes banqueros internacionales, verdaderos parásitos sociales por aprovecharse de un cuerpo o cuerpos que no son suyos, ese cuerpo o cuerpos son, somos el pueblo. También son grandes usureros y avaros a más no poder, por vendernos con altísimo interés, un dinero que no tienen, pero que sí, ansiosamente, esperan cobrar.
¿No tiene millones de razones el pueblo para protestar allí por dónde éstos indignos mandamases se reúnen para premiar a sus superiores los que nos han llevado a la ruina? Rotundamente sí, ¡porqué qué clase de capitalismo es ese! En el que las esperadas épocas de vacas gordas, las de abundancia y ganancias, se reparten entre cuatro gatos las estas abundantes ganancias. Y cuando vienen las temidas épocas de vacas flacas, las de perdidas y escasez pasan las facturas a los pueblos y ya de por sí ahogados contribuyentes.
¡O eso no es capitalismo, o el capitalismo es una tomadura de pelo y por lo tanto hay que acabar con el mito del capitalismo , cómo único, insustituible e indiscutible sistema valido para el bienestar, la prosperidad mundial y para la paz y la concordia entre los pueblos!